lunes, 8 de septiembre de 2008

RUTA PICO DE LA ESTRELLA

El sábado 23 de Agosto un grupo de intrépidos hombres compuesto por Luis, Sergio, Pedro y Alfonso se presentaron frente al pico de la estrella para afrontar su conquista en bicicleta.

El pico de la estrella (1298m) es la cumbre más alta de la provincia de Ciudad Real, incluido en el parque natural de Despeñaperros es una de las montañas más bellas de la sierra de San Andrés. 29 kilómetros de ruta era una excelente oportunidad para conocer la naturaleza del territorio a través de sus solitarias pistas forestales.

A las 9 de la mañana salimos desde Miranda del Rey en nuestras máquinas traga caminos. Cogemos una pista ancha y comenzamos a subir, no conviene meter mucha tranca porque queda desnivel para rato.

A los pocos km una inoportuna avería se apodera de la flamante Santa Cruz de Alfonso en forma de rotura de cadena, una rápida reparación por parte de Luis (de muy dudosa calidad, como veremos…) nos permite continuar hacia nuestra meta.

Las excelentes dotes del cuarteto hacen que no se aprecie la dureza del terreno y estos rueden a un ritmo endiablado la primera hora.

En pleno esfuerzo la cadena “reparada” de la Santa Cruz se vuelve a partir, lo que provoca una espectacular caída de Alfonso. Después de comprobar el maltrecho estado del ciclista y una nueva reparación, proseguimos la ascensión.

Sergio sufriendo (su hábitat natural en bici) de pequeño veía los dibujos animados de súper ratón, que decía “hay que mineralizarse y vitaminarse” tira de sus power gel milagrosos sabedor de lo que se aproxima.

Llegando a su fin, la subida se muestra caprichosa y especialmente cruel para el que no esté acostumbrado, 4 sube y bajas muy duros hacen que empecemos a pagar caro el esfuerzo. Como consecuencia, metemos plato pequeño e intentamos moverlo lo mejor posible. Después de X horas y X minutos coronamos reventados pero con la sensación de haber cumplido. Los regalos son unas fantásticas vistas, haber vencido a la montaña y una emocionante bajada.

Bajamos un ritmo infernal que hace que no paremos de rebotar, disfrutando y excitados, pero la excitación puede provocar algún susto que otro. Pedro y su Specialized Epic se salieron de la pista a más de 50km/h, un grito de guerra en forma de “Ay, ayyy, ayyyyyyy” provocan que su Fox inteligente de un curso acelerado de Brain Training y le salve de una más que segura caída.

En una zona pedregosa y técnica Luís, que parecía que se había dejado los frenos en su casa, y como amante culinario hace “migas” de su patilla de cambio, acompañado con un poco de radios rotos.

Después de este contratiempo terminamos el descenso que nos lleva a los coches en Miranda del Rey y unas merecidas cervezas.